Cuidado... llega la Viuda Negra.

Cuenta la leyenda, que hubo una mujer la cual amaba con locura a su marido y al morir éste, sintiéndose sola y abandonada, presa del dolor y el tormento que su muerte le había provocado, engendró un odio de tal magnitud que decidió vengarse de todos los hombres. Dicen que a causa de este odio, a la hora de su muerte, en vez de ir hacia la luz se dirigió a la oscuridad. Allí se encontró con el diablo e hizo un pacto con él, para que este le permitiera seguir con su venganza para toda la eternidad. El diablo la transformó en un espectro demoníaco capaz de producir cualquier mal. En Chile, los hombres le tienen mucho miedo a éste espectro y evitan encontrarse con ella en algún camino solitario, sobre todo a la caída de la tarde. Los que han llegado a verla, dicen que viste un traje largo, negro , el cual no deja ver sus pies y que nadie puede verle la cara hasta que está tan cerca que es imposible escapar de sus garras.

Tiene especial predilección por los hombres montados a caballo y utiliza su poder para asustar al animal, montarse sobre su lomo y conseguir dirigir a éste hacia un precipicio. Una vez llegado allí el caballo se precipitaría al vacío llevandose consigo al jinete, acabando así con la vida de ambos. A veces se siente sola, se acerca a algún poblado buscando el amor de un hombre que vague de noche por alguna calle poco transitada. Solo en estos momentos se la puede divisar desde cualquier ventana o balcón y conseguir ver su rostro. Pálida como una hoja de papel, huesos marcados, unos ojos gigantescos y una larga melena debidamente colocada bajo un velo negro q llega hasta el suelo al igual que su vestido. Anda sobre el suelo buscando a algún ingenuo que vaya tras de ella, incitándolo a perseguirla y llevándolo hasta un lugar donde poder hacer el amor con él. Al día siguiente su víctima no recordaría nada, solo le quedarían extraños arañazos en el cuerpo, aturdimiento y la vestimenta rota, aunque pudiéndose llamar dichoso de encontrarse con vida tras el encuentro con la Viuda Negra. El mundo va avanzando y cada vez le cuesta mas trabajo encontrar a algún jinete ya que a día de hoy lo que prima es el uso del automóvil. Cuentan que aprovecha el estado de embriaguez de algunos conductores para montarse en el coche y provocar así su muerte. Así que ya sabéis….si andáis de noche por algún camino solitario, tened cuidado no os la vayáis a encontrar y no podáis escapar de ella.

En la provincia de Salta, varios autores han llevado al papel algunas historias de la tradición popular. Tal es el caso del escritor Luis Borelli, que se dedicó a la historia de la Viuda Negra. La Viuda de la leyenda tiene, para empezar, distintas versiones acerca de su apariencia.

Los salteños dicen que es esbelta y joven, de unos cuarenta años. Si bien nunca nadie pudo verle el rostro, versiones describen a una mujer alta y aparentemente bella. Mientras tanto, en los valles de Lerma y Calchaqui la descripción de la viuda corresponde a una anciana a la que tampoco se le ve el rostro.

En cualquiera de las dos versiones las viudas hielan la sangre, y por supuesto, usan ropa y mantón de color negro, con el cual las "vallistas" se cubren de pie a cabeza, mientras que las "chaqueñas", esconden la cara pero muestran un tanto las piernas.

De ser así, esto es lo que sentencia el relato de Borelli:
"Lo perseguirá y asustará de tal forma, que el pobre hombre terminará por enfermar, ser abandonado por la concubina o nueva esposa, hasta finalmente morir casi seco de espanto. Pero esta Viuda, surgida de la tragedia y la traición -según cuenta- no se contentará con asustar a su ex marido, sino que también lo hará con todos aquellos infieles -que por suerte son poquísimos- aprovechando toda oportunidad para "espeluznarlos" de miedo y terror, sobretodo cuando distraídos vuelven a deshora a sus casas, medio "machaditos" y envueltos en vahos de alcohol."