Pérez Blanco, Narco-iglesias y otros curas truchos.
Cortesía del periodista y productor Rosarino Fabián Scabuzzo
(Por Fabián Scabuzzo) Días pasados revelamos a través de El Periodista en su Laberinto el fallecimiento del represor Jorge Walter Pérez Blanco, un agente civil de Inteligencia del ejército en las épocas de la dictadura militar que actuó en la zona de Rosario. Fue un espía profesional, señalando personas que luego fueron asesinados o desaparecidos, lo llamativo de su historia es su relación con la fe: Pérez Blanco se presentaba como obispo luterano,con hábitos sacerdotales, daba misa y además impartía la comunión, incluso a niños.
Otro “clérigo” de los servicios
En enero de este año el diario Tiempo Argentino contaba la historia de un clérigo falaz, que a la fecha de este post sigue vivito y coleando, se trata del “obispo” Mario Alberto Mingolla Montrezza, “de carrera eclesiástica meteórica”(…) “Fue agente del Batallón 601 del Ejército. Actuó con escuadrones de la muerte en América Central, antes de participar del narcogolpe del general García Meza en Bolivia”– reza el artículo, que les recomiendo leer completo. Mingolla además aparece sindicado en atentados en Italia atribuídos a la Logia Propaganda 2.
Alberto Mingolla es el principal referente de la Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Argentina Eslava, nacida en el 2001, que también integraba Pérez Blanco, figuran en la nómina de directivos con nombres encriptados, que esconden su pasado vinculado a la muerte y desaparición de personas en la última dictadura argentina.
En algunos foros llaman a esta agrupación religiosa “narco iglesia”, porque Mingolla fue detenido en 1987 con 375 Kg de cocaína en Brasil, allí cumplió condena y, según el artículo de Tiempo Argentino, fue en la cárcel brasileña donde “se encontró con Dios” y abrazó el evangelismo.
Tanto Mingolla como Pérez Blanco son parte del Parlamento Argentino de Religiones (PAR) , una institución que reúne extraños cultos, a muchos de los cuales asesoraba legalmente el mismo Pérez Blanco en vida, gracias a sus fluidos contactos con la Secretaría de Cultos de la Nación. La Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Argentina Eslava no está inscripta en el registro nacional de cultos, lo extraño es que funcione y que se sepa que hay personas de dudosa moral y tristes antecedentes en sus filas.
El PAR integra el listado de las numerosas entidades y representaciones religiosas vinculadas a la secta Moon o Iglesia de la Unificación, acusada de tráfico de armas y lavado de dinero, entre otras “perlitas”, en Argentina parece reunir a lo más peligroso de la ultra derecha, amantes de la estética y los nombres góticos y templarios, una peligrosa avanzada ideológica que llega a todo el país, especialmente en barriadas humildes. En Rosario el PAR tenía como representante al fallecido Pérez Blanco, que frecuentaba a otros personajes que hemos descubierto en fotografías encontradas en la web.
Estos delincuentes y asesinos son sucesores de José López Rega, con intereses en el mundo esotérico, representan la continuidad de la Triple A , además de adherir al nazismo, la versión vernácula del llamado ocultismo nazi o hitlerismo esotérico. Son “moonistas” con instrucciones precisas: inmiscuirse en religiones cristianas y en movimientos espirituales (Yoga, Hinduísmo y Budismo), crean marañas de instituciones e iglesias con nombres confusos, su objetivo es manejar las ideas de sus seguidores, constituyendo una fuerza política clandestina. Actúan principalmente en zonas vulnerables al narcotráfico o al delito.
Pérez Blanco y sus apóstoles
El Obispo Pérez Blanco y su discípulo Monseñor Teofano, cuyo nombre real es Juan Manuel Garayade (al que tildan de nazi en algunos foros y de tener vínculos con la Orden Bonaria de España) , supieron visitar el Ministerio Luz de Vida, de la calle Garzón 2555 de Rosario dirigido por los pastores Fabián Paolini y su esposa Estela Maris Fernández, otra iglesia que no figura en el registro de cultos, allí hicieron las reuniones fundacionales de la Mesa Coordinadora Pastoral de la República Argentina, una institución afín al PAR que intenta invadir y representar a las iglesias evangelistas y no tradicionales católicas.
La Mesa Coordinadora Pastoral de la República Argentina funciona en Rosario y está dirigida por Federico Gastón Samborski, José Roberto Samborski y Vilma Belkis Pérez, son de la misma familia: hijo, padre y madre. Todos fueron ascendidos como “reverendos” por la misma institución que dirigen y también nombraron como tales a Paolini y Fernández.
Los Samborski, una familia de fe
La familia Samborski dice pertenecer a la “Iglesia de Cristo Carismática”, también a la “Iglesia Apostólica Carismática de la Recta Doctrina“ y a otra más, la “Iglesia Misionera Veteros, Ntra Sra. de la Alegría”, ninguna de ellas está inscripta con esos nombres en el Registro Nacional de Cultos, aunque tienen locales de reunión en distintos barrios rosarinos.
En su twitter, Federico Samborski, también empleado administrativo de la Dirección de Cementerios de la Municipalidad de Rosario, se autodenomina “Monseñor”, y los álbumes de su Facebook están llenos de fotos con ceremonias del rito bizantino, con toda la pompa y el boato, mucha tela dorada, atributos medievales, velas, y pocos asistentes.
En las páginas de las iglesias y en el Facebook de “Monseñor Samborski” hay fotos de él y su padre junto al represor Pérez Blanco, e incluso lamentó su muerte a través de Facebook.
En contradicción con la relación que los unía a Pérez Blanco, los reverendos Samborski dicen pertenecer a la Oficina de Derechos Humanos de la Municipalidad y a la Comisión de DDHH del Concejo de Rosario.
La vinculación de ambos con estas oficinas de DDHH ha sido negada por la responsable del área de la Municipalidad y por el director del Museo de la Memoria de Rosario, Gabriela Sosa y Rubén Chababo, a lo sumo han participado en reuniones abiertas para representantes de cultos, junto a otros pastores y sacerdotes.
Quedan muchos interrogantes abiertos sobre las actividades de estas personas y el extraño sincretismo que practican, y sobre el éxito o no de sus objetivos. Me interesaba recopilar toda esta información obtenida en la búsqueda de los referentes moonistas de Rosario, vinculados a la ultraderecha y a represores que actuaron en servicios de inteligencia. La mezcla es difícil de digerir.
La libertad de cultos permite que haya una diversidad absoluta de creencias que se acomodan a las necesidades de fe de la gente, estos clérigos truchos imparten algo más que fe y representan un movimiento político en sí mismo, de carácter clandestino y oscuros objetivos.
(Por Fabián Scabuzzo) Días pasados revelamos a través de El Periodista en su Laberinto el fallecimiento del represor Jorge Walter Pérez Blanco, un agente civil de Inteligencia del ejército en las épocas de la dictadura militar que actuó en la zona de Rosario. Fue un espía profesional, señalando personas que luego fueron asesinados o desaparecidos, lo llamativo de su historia es su relación con la fe: Pérez Blanco se presentaba como obispo luterano,con hábitos sacerdotales, daba misa y además impartía la comunión, incluso a niños.
Otro “clérigo” de los servicios
En enero de este año el diario Tiempo Argentino contaba la historia de un clérigo falaz, que a la fecha de este post sigue vivito y coleando, se trata del “obispo” Mario Alberto Mingolla Montrezza, “de carrera eclesiástica meteórica”(…) “Fue agente del Batallón 601 del Ejército. Actuó con escuadrones de la muerte en América Central, antes de participar del narcogolpe del general García Meza en Bolivia”– reza el artículo, que les recomiendo leer completo. Mingolla además aparece sindicado en atentados en Italia atribuídos a la Logia Propaganda 2.
Alberto Mingolla es el principal referente de la Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Argentina Eslava, nacida en el 2001, que también integraba Pérez Blanco, figuran en la nómina de directivos con nombres encriptados, que esconden su pasado vinculado a la muerte y desaparición de personas en la última dictadura argentina.
En algunos foros llaman a esta agrupación religiosa “narco iglesia”, porque Mingolla fue detenido en 1987 con 375 Kg de cocaína en Brasil, allí cumplió condena y, según el artículo de Tiempo Argentino, fue en la cárcel brasileña donde “se encontró con Dios” y abrazó el evangelismo.
Tanto Mingolla como Pérez Blanco son parte del Parlamento Argentino de Religiones (PAR) , una institución que reúne extraños cultos, a muchos de los cuales asesoraba legalmente el mismo Pérez Blanco en vida, gracias a sus fluidos contactos con la Secretaría de Cultos de la Nación. La Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Argentina Eslava no está inscripta en el registro nacional de cultos, lo extraño es que funcione y que se sepa que hay personas de dudosa moral y tristes antecedentes en sus filas.
El PAR integra el listado de las numerosas entidades y representaciones religiosas vinculadas a la secta Moon o Iglesia de la Unificación, acusada de tráfico de armas y lavado de dinero, entre otras “perlitas”, en Argentina parece reunir a lo más peligroso de la ultra derecha, amantes de la estética y los nombres góticos y templarios, una peligrosa avanzada ideológica que llega a todo el país, especialmente en barriadas humildes. En Rosario el PAR tenía como representante al fallecido Pérez Blanco, que frecuentaba a otros personajes que hemos descubierto en fotografías encontradas en la web.
Estos delincuentes y asesinos son sucesores de José López Rega, con intereses en el mundo esotérico, representan la continuidad de la Triple A , además de adherir al nazismo, la versión vernácula del llamado ocultismo nazi o hitlerismo esotérico. Son “moonistas” con instrucciones precisas: inmiscuirse en religiones cristianas y en movimientos espirituales (Yoga, Hinduísmo y Budismo), crean marañas de instituciones e iglesias con nombres confusos, su objetivo es manejar las ideas de sus seguidores, constituyendo una fuerza política clandestina. Actúan principalmente en zonas vulnerables al narcotráfico o al delito.
Pérez Blanco y sus apóstoles
El Obispo Pérez Blanco y su discípulo Monseñor Teofano, cuyo nombre real es Juan Manuel Garayade (al que tildan de nazi en algunos foros y de tener vínculos con la Orden Bonaria de España) , supieron visitar el Ministerio Luz de Vida, de la calle Garzón 2555 de Rosario dirigido por los pastores Fabián Paolini y su esposa Estela Maris Fernández, otra iglesia que no figura en el registro de cultos, allí hicieron las reuniones fundacionales de la Mesa Coordinadora Pastoral de la República Argentina, una institución afín al PAR que intenta invadir y representar a las iglesias evangelistas y no tradicionales católicas.
La Mesa Coordinadora Pastoral de la República Argentina funciona en Rosario y está dirigida por Federico Gastón Samborski, José Roberto Samborski y Vilma Belkis Pérez, son de la misma familia: hijo, padre y madre. Todos fueron ascendidos como “reverendos” por la misma institución que dirigen y también nombraron como tales a Paolini y Fernández.
Los Samborski, una familia de fe
La familia Samborski dice pertenecer a la “Iglesia de Cristo Carismática”, también a la “Iglesia Apostólica Carismática de la Recta Doctrina“ y a otra más, la “Iglesia Misionera Veteros, Ntra Sra. de la Alegría”, ninguna de ellas está inscripta con esos nombres en el Registro Nacional de Cultos, aunque tienen locales de reunión en distintos barrios rosarinos.
En su twitter, Federico Samborski, también empleado administrativo de la Dirección de Cementerios de la Municipalidad de Rosario, se autodenomina “Monseñor”, y los álbumes de su Facebook están llenos de fotos con ceremonias del rito bizantino, con toda la pompa y el boato, mucha tela dorada, atributos medievales, velas, y pocos asistentes.
En las páginas de las iglesias y en el Facebook de “Monseñor Samborski” hay fotos de él y su padre junto al represor Pérez Blanco, e incluso lamentó su muerte a través de Facebook.
En contradicción con la relación que los unía a Pérez Blanco, los reverendos Samborski dicen pertenecer a la Oficina de Derechos Humanos de la Municipalidad y a la Comisión de DDHH del Concejo de Rosario.
La vinculación de ambos con estas oficinas de DDHH ha sido negada por la responsable del área de la Municipalidad y por el director del Museo de la Memoria de Rosario, Gabriela Sosa y Rubén Chababo, a lo sumo han participado en reuniones abiertas para representantes de cultos, junto a otros pastores y sacerdotes.
Quedan muchos interrogantes abiertos sobre las actividades de estas personas y el extraño sincretismo que practican, y sobre el éxito o no de sus objetivos. Me interesaba recopilar toda esta información obtenida en la búsqueda de los referentes moonistas de Rosario, vinculados a la ultraderecha y a represores que actuaron en servicios de inteligencia. La mezcla es difícil de digerir.
La libertad de cultos permite que haya una diversidad absoluta de creencias que se acomodan a las necesidades de fe de la gente, estos clérigos truchos imparten algo más que fe y representan un movimiento político en sí mismo, de carácter clandestino y oscuros objetivos.
Muy buen trabajo, con mucha y clara información, que siento necesario agradecer, con un saludo a esta publicación y al periodista Fabián.
ResponderEliminarDentro de este desfile de personajes siniestros, hay un elemento del que recién ahora se está empezando a hablar: el llamado "gordo Franc", socio de todos ellos, de represores y proxenetas, y "monseñor" de la capilla de San Vicente. Una lacra, una mancha de grasa, que esta creciendo en los bordes del conurbano bonaerense.
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