Un análisis sociológico de la serie Dr House.

“La arrogancia hay que ganársela... dime que has hecho para obtener la tuya”

Por: Romina Bravo

¿Quién es? ¿De dónde viene? A dónde va este personaje? Cuál es la historia subyacente? Cuál es su esquema de “verdad”? Las verdades de House, una lista de síntomas escrito en una pizarra, la inhumanización del instrumento de trabajo: los paciente y él mismo.

Introducción

Dr. House es una serie de televisión estadounidense estrenada el 16 de noviembre de 2004 creada por David Shore, quién creo el personaje inspirado en Sherlok Holmes ya por su capacidad de resolver lo complejo y por el consumo de drogas.

El Dr. Gregory House, es un Infectólogo y Nefrólogo encargado del Departamento de Diagnóstico Médico del Hospital Universitario Princeton-Plainsboro de New Jersey. El personaje está interpretado por el actor Hugh Laurie. Uno de los rasgos principales del personaje es su marcada misantropía, una clara antipatía a veces algo inofensiva y muchas de las veces elocuentemente sarcástica y dañina.

House es un obsesivo, egoísta y soberbio médico que no deja de lado el viejo método inductivo, en muchas oportunidades echando por tierra la evidencia médica aunque por supuesto no deja el libro de recetas de la medicina moderna. Cuenta con un equipo de colaboradores, un grupo de médicos tan egocéntricos soberbios y narcisistas como él; los personajes principales de la serie:

Dr. Eric Foreman (Omar Epps): neurólogo. Lo contrató por tener antecedentes de delincuencia juvenil.

Dr. Robert Chase (Jesse Spencer): medicina intensiva. Un ambicioso Australiano que juega a favor de su conveniencia.

Dra. Allison Cameron (Jennifer Morrison): inmunóloga a quién House afirma que la contrató, por ser una buena doctora pero sobre todo por “estar bien buena”.

Dr. James Wilson (Robert Sean Leonard): jefe de oncología del hospital. Es el mejor y único amigo de House

Dra. Lisa Cuddy (Lisa Edelstein): endocrinóloga y directora del hospital, y por tanto jefa de House, con quién se enfrenta constantemente por la heterodoxa4 manera de hacer su trabajo.

La dramática serie Dr. House tiene todos los condimentos para dejar al espectador pensando e interpretando su propia realidad más allá de las ironías de este cruel personaje.



Todos mienten, incluso yo.



La autoridad dominante de la medicina ha ido increyendo históricamente a fuerza de imcolocarse sobre otros saberes y a fuerza de expandir sus criterios a casi todos los ámbitos científicos. La función medicalizadora y normalizadora de la salud difunde el hecho de que no sólo opera en los campos tradicionales sino que se ha expandido autoritariamente al resto de los espacios científicos y sociales, convirtiéndose en una forma de regulación social que discrimina qué es lo patológico y peligroso, y qué lo normal y saludable (Foucault 1992).

La serie Dr. House es una adscripción perfecta de lo que la medicina actual realiza a través del sistema de salud con el modelo médico hegemónico. Erguida como único esquema de saberes verdaderos despliega la racionalidad positivista un conjunto de reglas de manual en las que también se haya inscripta la relación médico paciente, Gregory House no es más que la expresión de la organización de este criterio en su más amplio sentido, incluyendo el sistema de transgresiones (Foucault 2002) por el cual toma la tangente sin importarle el medio para llegar al fin.

El problema ético se presenta cuando ese fin es salvar una vida, así fuere a riesgo de perder otras o con daños provocados por iatrogenia, ya lo dice (Foucault, 1976) uno de los aspectos más nocivos de la ciencia médica es su aspecto no científico y su capacidad de matar, algo que Dr. House esta a punto de hacer en todos los capítulos.






Dr. House: “todos en nuestra larga carrera mataremos a alguien es la regla de la medicina, hay que enfrentarse con ello esa es la cuestión” (House dando una clase de medicina en el episodio 20 primera temporada)

Dr. House el más respetado del mundo de la medicina de ficción presenta una aversión a sus pacientes, en principio no quiere conocerlos y sólo toma los casos que representan un desafió personal, realiza sus diagnósticos a través de la información clínica que le brinda su equipo de trabajo y a través de métodos muchas veces poco ortodoxos como la intuición. Cuestiona la actitud moral de sus colegas aunque de todos modos estos siguen lo que la autoridad impone (él es el jefe), desde la violación de las reglas de propiedad privada (revisa las casas sin permiso para encontrar evidencias que configuren el diagnóstico) hasta la atención de asesinos seriales o la práctica de la eutanasia.

El equipo de trabajo de House también presenta hostilidad hacia los pacientes, excepto la Dra. Cameron quién intenta colocar el freno ético y moral a sus decisiones y su vez se involucra emocionalmente con ellos, cosa que House detesta; los pacientes para él son sólo casos a resolver, son sólo piezas de un rompecabezas. La tensión se resuelve cuando Cameron termina obedeciendo a las locuras que House propone, incluso en la primera temporada se enamora de él y lo chantajea para conseguir una cita.

Yendo más lejos aún, la cuestión propone un debate filosófico sobre la regla moral: hasta dónde el proceso de experimentación, debe ir hasta las últimas consecuencias? Cuánto y cuándo estamos más lejos o más cerca del esquema de verdades impuesto por el sistema racional positivista que se presenta como único discurso posible (para empezar) ante el binomio salud- enfermedad? Cuánto podemos justificar los medios que se utilizan hacia los fines científicos que claramente responden a lógicas de dominación hegemónicas conformadas a través de procesos históricos?, Estamos preparados para echar por tierra todo lo conocido en relación al esquema de verdades éticas y morales que se presentan como únicas y absolutas? Estamos conscientes de que podemos desobedecer?

El lugar de la herejía



Al respecto de la distribución del espacio hospitalario en lo que tiene que ver con la distribución racional: clasificación registro y ordenamiento de los pacientes desde su edad a su poder económico, hasta la complejidad de su enfermedad y los requisitos de admisión, tratamiento y alta, se configuran en un escenario y circulación ya conocido: el consultorio externo y la internación.

Dra. Cuddy como directora del hospital es quien autoriza los procedimientos tanto quirúrgicos como metodológicos y es quién intenta hacer cumplir el código y la norma que reglan el hospital apelando a la sanción jurídica ante su incumplimiento. Una junta médica es la encargada de discriminar a quién se le da o no un transplante o un tratamiento complejo: la edad y el dinero determina si el beneficio es otorgado o no a pesar de que la vida del paciente este en peligro; por supuesto Dr. House se las arregla para olvidar estas decisiones.

En cuanto a la distribución del espacio del Departamento de Diagnóstico esta compuesto por un pizarrón una fibra algunas sillas y una mesa de trabajo y por detrás su oficina personal. Un espacio asignado para la elaboración del plan a partir del intercambio de ideas con sus colegas a los que, las más de las veces, maltrata y subestima.




La distancia jerárquica es marcada por un juego de asimetrías paciente – médico, médico – departamento, también por la distribución estructural y arquitectónica del hospital de Princeston muy familiar al común denominador que representa al hospital real. En torno a la responsabilidad en el trabajo hace visible tanto el rol como la función y su cumplimiento. Cada uno se responsabiliza en cuanto a la decisión médica y su implicancia jurídica: Dr. House indicará a sus pacientes el procedimiento para al análisis y el tratamiento de la enfermedad ya que necesita autorización para su aplicación, sino podría ser penado por la ley; House viola casi permanentemente esta voluntad, aplicando la medicina a partir de la profesión de mentiras, engaño y la manipulación a las autoridades del hospital y a los pacientes. Esto rebela un cuadro de doble entrada, por un lado Dr. House es un rebelde de los métodos más ortodoxos y por el otro implementa autoritariamente la decisión médica más allá de toda voluntad que no fuere la propia.

O sea, hace lo que quiere, se presenta como despótico, la pregunta es: la trasgresión de la regla se revela ante la racionalidad que transgrede? O sólo es un esquema de imposiciones propio del aspecto expansivo de la racionalidad médica?

House como un héroe – antihéroe responde no sólo a una representación social de la medicina como discurso autorizado sino como un rebelde de la regla moral que desdobla, inclusive, como un loco por fuera de la introyección de la norma presentado batalla a la doxa establecida7 con un cúmulo de intuiciones que llevará a cabo en pos de una nueva justicia… en pos de la vida, pero… se pone por fuera del esquema médico tradicional de la salvación de la vida lejos de la fe supraterrenal del esquema racional positivista? la respuesta es No!

En fin



Dr. House es contradicción pura, y en algún momento se convierte en súper héroe, este es el aspecto más mercantil de la serie, su debilidad y su fortaleza. Es su síntesis. Cumple con todos los requisitos de un personaje sarcástico, brillante e inhumano que es idolatrado por pacientes en la ficción y por teleespectadores en la realidad. Nos muestra el esquema de racionalidad en un cuadro de doble entrada, lo cuestiona a la vez que sigue el manual de procedimiento. Nos presenta la pregunta de si su actuar representa una actitud transformadora o es la expresión cruel del sistema médico hegemónico dominante y su sistema de verdades.

“Todos mienten incluso yo”resignifica la lucha por la imposición de la verdad y el

ocultamiento de los procesos históricos, visibiliza que hay una mentira, (aunque no cual de todas) lo que para nosotros los sociólogos representa todo lo que tiene de cruel el sistema capitalista de la producción, todo lo que tiene de explosivo y expansivo, y todo lo que en realidad encubre: relaciones de dominación asimétricas, jeráquizantes, en beneficio del capital, y en este análisis de las industrias farmacológicas, y si se quiere de la industrias culturales después de todo la salud vende, incluso en esta tan mirada serie de televisión.

Para concluir, el complejo sistema hegemónico de la medicina tradicional, que deja por fuera todo lo no idéntico a sí mismo, a la vez que expande su accionar y disemina su racionalidad hasta el infinito deja en el sin fin de la contingencia a lo que no puede asir para si, y luego lo niega. El dolor propio de esta realidad recobra sentido cuando flota el cadáver en el rio, lo que a su vez se nos presenta contradictorio y fragmentado.
Dr. House nos muestra como la experimentación con Humanos en pos de la cura de la enfermedad es parte de lo negado…no sabemos cual es la verdad negada, si suponemos que esta verdad trabaja para las fábricas de medicinas, en las escuelas, en las universidades y en instituciones reguladas por la unidad instrumentalizadora en la figura del Estado; pero como ya mencione este no es un cuadro de una sola entrada, la dominación esta internalizada por los sujetos a los cuales se a anulado la posibilidad de resistencia y lo que para algunos es pura crueldad para otros es salvar vidas. Lo que Foucault (2002) llamó cuerpos dóciles dispuestos a obedecer, autorregulados en la norma que esta autoridad impone y que a su vez se presenta como noble y única, y que esconde la complejidad real de un mundo.

La síntesis del concepto científico no guarda en absoluto todo lo que este tiene de cualitativo (Adorno1975). House es la contradicción, pero también es la síntesis conceptual del héroe, es lo que esta brillante serie nos muestra! Nos invita a hurgar en el intermitente mundo de verdades que ha dejado el mundo de las almas para resolver el dolor con lógicas matemáticas.

Por allí está lo que no entendemos… no se puede resolver la tragedia en la realidad, y sí es perfectamente resuelta en la ficción por un brillante médico que es síntesis de sí mismo y además es contradicción plena. La muerte de Dios ha sido medicalizada (Foucault 1990). El dolor es parte del simulacro (en todos los sentidos) y la fe por la salvación de vida está puesta en Dios y “además” en Dr. House y en el mundo material de la vida terrenal, incluso y más si nos damos cuenta en la cosa en que nos conformamos… así que corrijo… la lucha entre los dos héroes va de empate:

“Dr. House 3 versus, Dios 3”

Boyd: Mi padre dijo que debía disculparme con usted…

House: sigues escuchando voces?

Boyd: Usted es muy afortunado, va por la vida con la certeza de que hace lo correcto… (Irónicamente): sé lo reconfortante que es eso…buena suerte.

Wilson a House : Oh vamos nadie es tan perfecto como tú, es posible creer en algo y aún así fallar y poder vivir con ello “House eres…como dios te hizo”

(Debatiendo sobre la existencia de Dios, capítulo 19 segunda temporada)