La Virgen María desde el análisis del Obispo Miguel Batet.

NUESTRA SANTA SEÑORA MARIA
Para todos hay una Madre superior a todas las madres de la tierra, la Madre que por Si es la perfección de la Maternidad, cuya tierna solicitud cobija todas las madres e hijos de la tierra y cuya compasión y amoroso consuelo se derrama sobre los tristes y afligidos. Es Nuestra Señora, la CONSOLATRIX AFLICTORUM, (el consuelo de los afligidos), la que en un tiempo fue Madre de el Maestro Jesús y ahora es la Representación de Dios la Madre. Puntualicemos el lugar que la Religión Cristiana corresponde al culto de Nuestra Señora María, que debe tenerlo para que Religión sea completa, y contribuiremos con ello activamente al advenimiento de la futura Religión cuyos ideales nos mostrarán la unidad en que se resumen los aspectos masculino y femenino de todas las cosas.
"Dios La Madre" es una frase extraña para el Cristianismo. Muchos los temas gnósticos definían la Santísima Trinidad como Dios que el Padre, Dios la Madre y Dios el Hijo.
Si volvemos a los primeros siglos de la era cristiana, G.R.S. Mead nos dice que:….. "él contempla ya formado un mundo religioso de inmensa actividad, como una gran actividad del pensamiento y una gran energía en el empeño religioso que no tiene paralelo en el mundo occidental. Miles de escuelas y comunidades por todas partes, un gran esfuerzo por vivir la vida religiosa. Aquí él encuentra innumerables puntos de contacto con otras religiones; se mueve en una atmósfera de libertad de la que no había tenido experiencia anteriormente en la tradición cristiana. ¿Quiénes son estas personas-no pescadores, esclavos, no los pobres desamparados; aunque éstos también se están esforzando-si no estos hombres de saber y vida ascética, santos y sabios?
"Así lejos de encontrar un cortante divorcio entre la ciencia (o filosofía) y la religión (o teología), precisamente estas comunidades se vanaglorian de que es posible conocer las cosas del alma también como las cosas del cuerpo. Ellos se esforzaban por obtener el conocimiento de Dios como la ciencia de las cosas reales, ganó seis de las cosas que son. Era de se de llamados por muchos nombres por aquellos que después los señalaron como herejes; y uno de los nombres que se daban ellos mismos era de abrir " pronósticos". La costumbre ha hecho que se haya escogido como el nombre común a todos ellos. Usualmente se alude a ellos ahora en la historia de la iglesia, los agnósticos.
En la Iglesia Católica Liberal, Nuestra Señora está siendo restituida a algo parecido a la elevada posición que ocupaba Sophia, la Madre del Mundo, entre los Gnósticos. En verdad, se nos han hecho que el cargo de Madre del Mundo de Jefa Del Departamento de Maternidad en esta tierra, bajo la Jefatura del Rey del Mundo, nunca está vacante; y que durante la Edad Media, María, la Madre de Jesús, obtuvo ese cargo. El objeto de esta rama del gobierno del mundo es atender a todas las madres, el gran trabajo que realizan todas las madres y el sufrimiento que ocasiona la maternidad.
Concepto del Budismo:
Un concepto similar a la idea gnóstica de Dios la Madre como Sabiduría Divina aparece en el Budismo del Norte, bajo el aspecto de
Kwan Yin, la Madre Compasiva, el aspecto femenino de Padmapani, o Avalokitesvara. Su nombre, Kwan Yin, que Significa "La que Escucha los Lamentos" o "La Observadora Auto existente de los Sonidos del Mundo". Ella oye y responde a cada grito de pena, y así los chinos la llaman "Gran Amor", "Simpatía Suprema". Para China y Japón, Ella es la representante del Aspecto Femenino de la Deidad.
Igual que Nuestra Señora de los cristianos, a menudo se la pinta sosteniendo un niño, pero ese niño es la Humanidad, y "Simboliza Su disposición para ofrecer a los desencargados que sufren otra oportunidad de un rápido nacimiento". (Kwan Yin, "por el Reverendo Spurgeon Medhurst, en "The Theosophist", noviembre 1921). También se la representan en el acto de enviar a su pequeñuelo desde los reinos de la Luz hacia abajo, al mundo de las tristezas y tribulaciones. Ella está de pie en medio de resplandeciente nubes, sosteniendo en una mano un atomizador de sauce, mientras que del frasco que tiene en la otra mano cae una gota de agua de la Sabiduría, que iluminará ahora la oscuridad del mundo inferior para rodear así a su hijo. La gota se dilata y se convierten en una burbuja que encierra al pequeñuelo, que mira anhelosamente a su Madre Celestial. Ella sabe las penas y pruebas que le esperan; sin embargo, Su inagotable Amor lo envía allá con Sabiduría suficiente para hacerles frente y vencerlas, si Él está resuelto a ello; y así Ella le sonríe cuando él entra la oscuridad de abajo.
del Hinduismo:
En el hinduismo la adoración a Dios la Madre toma una forma diferente. La Trinidad Hindú es la de Brahma, el Creador, Vishnú, el Preservador, y Shiva el Destructor o Regenerador. Cada una de estas Personas o Aspectos de la Deidad, al manifestarse en el universo da forma a Su Poder o Shakti, en una Consorte Divina.
Aquí, entonces, se dá énfasis más bien a la Consorte Divina que a la Madre Divina, se dá énfasis a la Personalidad Dual, Esposo-Esposa. Es el eterno "par de opuestos", que existe desde Dios hasta el átomo; Purusha-Prakritti-Espíritu- Materia, positivo-negativo; pues la ciencia ha descubierto que el átomo es, no un átomo o unidad, que no se puede reducir, sino una dualidad compuesta de protón positivo y electrón negativo. Así Brahma, la Primera Persona de la Trinidad, el Creador manifiesta Su Poder a través de Sarasvati, Diosa del Conocimiento, de la Sabiduría, de Palas Atenea hindú; Vishnú, la Segunda Persona de la Trinidad, Narayana, Hari, tiene como Consorte a Lakshmi. Diosa de la Belleza y del Amor, llamada también Padma, Kamala y Shri, el Loto del Mundo; (3) Shiva, la Tercera Persona de la Trinidad, Kala,o Señor del Tiempo, el Destructor; Señor de la Ardiente Tierra; el Gran Asceta; Sharkar, cuyo poder una vez despierto en el hombre consume la naturaleza inferior y lidera el Yo Divino dentro de él; tiene como Consorte a Parvati, la Diosa de la Fortaleza, cuyo símbolo es el León. A ella se le conoce por muchos nombres: Uma Himavat, la hija de los Himalayas, May Kali, la Dama del Tiempo, la Madre Destructora; Gaurí, Duraga, la Inaccesible; Sati, la pura; Baghavati, la Santa.
La mente hindú no piensa en lo masculino y lo femenino como separados. Los hindúes han definido al ser humano como un hombre, su esposa y su hijo. El señor Jinarajadasa observa que:… " tanto se piensa en esta asociación como algo inseparable que aunque Sri Krishna, el instructor del gran evangelio del Bhagavad-Gita", es una encarnación del Aspecto Masculino de Dios, algunas veces se Le llama Radakrishna, cuyo nombre tiene el de Su Consorte antepuesto al Suyo". Así sucede también con Guarishankar.
La devoción tributada a nuestra gloriosa Madre, la Bendita Virgen Maria, siempre ha rebozado de gran poder en la Iglesia Católica, y como sucede con otros poderes espirituales, esta fuerza debe hacerse efectiva en todos los planos. Ante las hijas de María, el futuro les presenta la posibilidad de seguir a Nuestra Señora en la noble vocación de la maternidad. Para alcanzar este resultado a la perfección, a la doncella se le recomienda cultivar especialmente la pureza, el poder de la dignidad y el aspecto todopoderoso del amor que hace que la Madre del Mundo sea adorada como ideal de la Maternidad.
Todos los hombres grandes han tenido sus grandes madres, pero, ¿hay alguna madre que no sea grande? María, elegida para ser la Madre de Nuestro Señor, el Cristo, fue la primera de muchas hermanas. Pero las muchas hermanas también reciben la gracia de la Suprema Madre, y a su turno ellas, se convertirán en madres y con la inspiración alcanzarán el mismo nivel que Ella ha alcanzado. Esta
es la gloriosa meta que les espera a las hijas de María, pero desgraciadamente se ha olvidado a menudo que los hombres también son hijos de María. Es por este olvido que el mundo es menos poderoso en su control y guía. Siguiendo sus huellas, las mujeres deberían tratar de mantener su honor bien en alto y vivir como debe ser.
De la misma manera se espera que la nobleza de la Gran Madre del Mundo sea sostenida por todos sus hijos, los hombres.
María, la Madre de todos nosotros, silenciosamente vive como un gran poder inspirador en las vidas de sus hijos e hijas. Sus hijas han oído el llamado que Ella ha musitado amablemente, dulcemente, prevaleciendo sobre todas las discordias y crudezas del mundo, el glorioso misterio de la maternidad, esta cruz en la cual Su perfecta Gloria es revelada. Es en esta ocasión donde se muestra toda la grandeza de la maternidad, porque nada puede comparársele en nobleza y dignidad.
Y a sus muchos hijos ¿no ha llamado nuestra gran Madre incitándoles a expresar el esplendor de ser padres? Afortunadamente existe un gran ideal para todos los jóvenes del mundo, ideal que debería presentárseles como un ideal lleno de pureza y poder. Cada cual debería comprometerse a si mismo para servir a la Santa Madre María, reverenciándola en primer lugar, a través de todas las mujeres, porque ellas son sus representantes. Para hacer este trabajo, los hombres deberían dedicar con devoción la mayor parte del tiempo a perfeccionarse si mismos en todo aquello que signifique el ennoblecimiento espiritual de la paternidad. Para ellos la primera ley debería ser: "Mantener en alto el honor como lo harías con un hermano de Nuestro Señor" y la segunda sería: "Glorificad a Dios en vuestro cuerpo". Cuando se haya cumplido esto, el gran hecho de la paternidad de Dios será realizado y repetido por los hombres, así como la maternidad lo será para las mujeres. Cuando se haya comprendido plenamente esto, entonces nuestra Madre será justificada ante Sus muchos hijos y entonces podremos servirle bien y verdaderamente.
La paternidad de Cristo es una maravillosa conquista y siempre la espiritual perfección se manifiesta en el cuerpo físico. Por lo tanto, ¿podemos conseguir el esplendor de Su cuerpo sin sentirnos inspirados a contemplar la delicada contextura de Su piel, la suprema pureza que brilla radiante a través de Su sano vehículo y de Sus penetrantes y sin embargo bondadosos y bellos ojos?, ¿no es éste un ideal que debemos seguir hasta lograr alcanzarlo para manifestar aquella perfección que está manifestada en Él?
Démonos cuenta, entonces, de que las Fiestas de Nuestra Señora María, nos trae a, nosotros hijos de María, un mensaje de completa dedicación a Su servicio, así como a las hijas de María, ya les fue dado el glorioso objetivo a través de los siglos.
Al contemplar a la imagen de este maravilloso SER, la Madre Bendita , nuestra primera impresión es la de una ternura infinita ante la que resulta escoria la más profunda ternura del corazón humano. En Nuestra Señora María está en absoluta perfección todo cuanto el hombre pueda haber concebido sobre la idea de Feminidad y todo cuanto pueda haber idealizado en el concepto de Maternidad. Es la Madre de las madres, y en Su presencia intuimos que todo lo comprende y se compadece de todos los seres y Cuya tierna solicitud ampara aún al más bajo y miserable. Su Maternidad abarca todos los seres vivientes y en verdad es la Madre de todo cuanto vive.


Por Monseñor Batet.
Iglesia Católica Liberal.